Nuevo baremo de autos… ¿me afecta?

Recientemente hubo una noticia que ha podido pasar desapercibida para la mayoría de la población que no tienen relación con el sector asegurador: el gobierno aprobó la modificación de la Ley sobre responsabilidad civil y seguro en la circulación de vehículos a motor, más conocida como el baremo de autos.

Este cambio legislativo actualiza el sistema vigente desde 1995. Mediante el nuevo contenido, identifica nuevos perjudicados y nuevos conceptos que no estaban recogidos hasta ahora.

De este modo, aumenta el conjunto de indemnizaciones, destacando las correspondientes a los casos de fallecimiento (prestando especial atención a los hijos y demás personas dependientes) y de grandes lesionados. Las indemnizaciones por fallecimiento se incrementan un 50% de media, y por secuelas un 35%.

Especialmente significativo es la nueva consideración del daño patrimonial. El actual baremo resultaba insuficiente, y la nueva ley clarifica y regula mejor el concepto de gastos y utiliza un método de cálculo del lucro cesante más adecuado.

Además, es digno de resaltar que este cambio legislativo también afecte a la sanidad pública. Las aseguradoras indemnizarán a los diversos servicios públicos de salud los gastos derivados de nuevos perjuicios cubiertos.

Por otro lado, es conveniente señalar que los principales afectados, en primera instancia,  por este aumento en las indemnizaciones serán las aseguradoras de las aseguradoras, es decir, las reaseguradoras,

Esto se debe a que  la mayoría de las compañías de autos españolas tienen, lo que se denomina, contratos no proporcionales para cubrir estos riesgos. Es decir, lo que intentan es frenar las pérdidas a consecuencia de uno o varios siniestros. Por lo tanto, a partir de cierta cantidad pagan las reaseguradoras, que serían quienes tienen que sufrir el aumento con respecto a las indemnizaciones anteriores.

Sin embargo, a pesar de que el mercado reasegurador lleva varios años en caída de precios (al igual que la práctica totalidad del mercado asegurador español), este gran incremento supondrá, muy probablemente, una subida en las tasas de reaseguro.

Llegados a este hipotético punto, las aseguradoras deberán decidir si asumen más riesgo o incrementan los precios finales, debido a la subida del coste de reaseguro.

Por todo esto, existen posibilidades de que este cambio afecte a los conductores de automóviles, ya que, ahora supondrán un peligro mayor para el sector asegurador.

Dado que anteriormente una víctima de tráfico español valía mucho menos que una francesa, es una medida que nos acerca a Europa, no obstante, ¿afectará también a nuestros bolsillos?