Cómo usar de forma segura la escalera de mano
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Los lunes no se acerque a una escalera de mano: sufrir una caída es el accidente más frecuente que se puede tener en el hogar. Si la caída es desde una escalera de mano, es posible que sea uno de los más graves que tenga. Las causas más frecuentes de caída de una escalera es por colocarla de forma incorrecta: apoyarla en un ángulo inadecuado (el mejor es de 75º con la horizontal), o sobre una superficie irregular o resbaladiza. También por usarla de forma no adecuada: recuerde que se asciende, desciende y se trabaja de frente a la escalera, y que no se puede usar con manos ocupadas o con un calzado inadecuado, como las chanclas. Nunca se pueden subir dos personas a la vez en una escalera de mano. El peor día de la semana para subirse a una escalera es el lunes, pues es el día de la semana en el que se producen más accidentes en el hogar.
Si tiene más de 65 años regale su escalera de mano: a partir de esta edad una de cada tres personas sufre una caída cada año. De ellas, una de cada diez tendrá una fractura. Las caídas asociadas a la edad se deben a múltiples factores, como la pérdida de reflejos, problemas de visión, efectos secundarios de los medicamentos, y problemas en los pies, entre otros. Debido a ello, para una persona mayor de 65 años, subirse a una escalera de mano puede ser uno de los mayores riesgos a los que puede enfrentarse. No lo dude, si tiene más de 65 años, pídale a otra persona que sepa usar una escalera que se suba por usted… y tenga a mano su seguro de accidentes de hogar, porque en el año 2007 existieron más de 38.000 accidentes domésticos en España por escaleras.
La indemnización por accidentes de escalera: las pólizas de accidente que cubren las consecuencias de una caída de escalera, dependiendo del condicionado, pueden indemnizar los gastos médicos, días necesarios para la recuperación, secuelas e incluso una incapacidad laboral. El uso incorrecto de una escalera puede reducir la indemnización (léase siempre las instrucciones del fabricante de la escalera).
Un pequeño salto desde una escalera que terminó en una incapacidad laboral: hace un par de años estudie el caso de un trabajador que saltó de una escalera de mano cuando le faltaban dos peldaños para llegar al suelo, lo que le provocó un dolor intenso en una cadera. Atendido en su Mutua laboral, se le diagnosticó una necrosis de cadera postraumática. La evolución fue desfavorable, necesitando finalmente una prótesis de cadera, motivo por el cual se le reconoció una incapacidad laboral derivada de accidente de trabajo. Aunque es un caso excepcional, el salto desde la escalera tuvo un coste personal y social muy importante.
Os dejo aquí un enlace a un folleto del ministerio de empleo para evitar los accidentes domésticos.