Tipos de pólizas
En el mercado existen muchos tipos de pólizas de seguro diferentes. Según el tipo de seguro que contrates, tendrás una serie de coberturas u otras, por lo que es muy importante conocer los diferentes tipos de pólizas que existen antes de escoger una. En este artículo, conocerás todos los detalles.
¿Qué es un seguro?
El seguro es una forma de proteger a los individuos y a los bienes frente a las consecuencias de los riesgos. La protección la ofrecen las compañías de seguros, que se encargan de reparar o indemnizar todo, o parte, de los daños y perjuicios ocasionados por determinadas situaciones que son consideradas accidentales.
Los seguros son fórmulas de coberturas muy útiles y ampliamente extendidas en la sociedad moderna. Para disfrutar de las coberturas de los seguros, tendrás que pagar una cantidad de dinero, llamada “prima del seguro”. A cambio, recibirás una compensación económica o un servicio siempre que se presente la situación contemplada en la póliza.
Los seguros ofrecen una combinación de servicios dirigidos a la protección de las personas y su patrimonio. Algunas acciones que llevan a cabo las aseguradoras son prevenir la aparición de situaciones que causen daño, proteger los bienes en ciertas condiciones, ahorrar para subsanar los posibles daños futuros y, en el caso de los seguros de salud o de vida, incluso fomentar los hábitos de vida saludables.
Los seguros son, a día de hoy, la opción más eficaz y económica para la gestión de riesgos. En este sentido, muchas empresas no podrían realizar sus actividades sin este tipo de protección.
En resumen, un seguro se basa en el reparto del daño entre un número muy elevado de personas con necesidades de protección iguales o similares. De esta forma, cuando un suceso que produce daños concretos a una de estas personas, todas las demás también participarán en la reparación del mismo a través de las primas que pagan por sus pólizas de seguro.
¿Qué es una póliza de seguro?
Una póliza de seguro es un contrato entre una persona física, un empresario o una persona jurídica y una compañía de seguros. Al firmar el contrato, ambas partes se vinculan en virtud del mismo.
En este contrato de seguro deben aparecer y especificarse cuáles son las obligaciones y deberes de cada una de las partes. Es decir, tendrán que aparecer los términos y las condiciones a que están sujetas ambas partes, como los ámbitos y la cobertura del seguro.
La póliza de seguro te cubre de los riesgos previstos en el contrato, es decir, que te protege de la posibilidad de que se produzca el evento dañoso y por el que queda cubierto para no tener que afrontar un gasto elevado en un momento determinado. Todo esto se produce a cambio de una prima, que pagarás ya sea cada año o cada mes.
¿Qué se puede asegurar?
Hoy en día, es posible asegurar prácticamente cualquier bien. Sin embargo, hay que tener en cuentas ciertas características para poder asegurar algo. Para que una pertenencia sea asegurado deberá cumplir con los siguientes requisitos:
- En primer lugar, debe tratarse de un bien material o inmaterial. Por ejemplo, podemos asegurar un coche o una vivienda, pero también los perjuicios que nos pueda causar una invalidez, ya sea temporal o permanente.
- Cualquier pertenencia que vayamos a asegurar debe existir en el momento (o al tiempo) en que se empiecen a manifestar los riesgos.
- Debe poder tasarse con dinero.
- Debe ser objeto de una valoración lícita. Esto significa que no se puede asegurar algo obtenido de forma ilícita o un objeto que sea ilícito. Por ejemplo, no podrías asegurar un cargamento de drogas o de armas.
- El objeto que asegures debe estar realmente expuesto a perderse por el riesgo que corre el asegurado.
Aunque es posible asegurar casi cualquier bien, es importante señalar que no siempre encontrarás en el mercado un seguro para todo. En este sentido, la mayoría de los seguros son productos preestablecidos, diseñados para cubrir una o más situaciones concretas.
Tipos de pólizas de seguros
En el mercado encontrarás muchos tipos de pólizas de seguros. Cada una de ellas está diseñada para protegerte a ti o a una pertenencia frente a cierto tipo de riesgos.
En este sentido, las pólizas de seguro más habituales son las de seguros de coche, seguros médicos, de vida, de responsabilidad civil de la empresa u otros tipos de pólizas que se adaptarán a las necesidades de cada cliente.
Póliza de seguro de hogar
Los seguros del hogar son un tipo de póliza que protege a tu hogar de cualquier desperfecto o catástrofe doméstica. En este tipo de pólizas quedan cubiertos los daños del hogar, así como los provocados por incendios, inundaciones y otro tipo de accidentes o problemas domésticos. Las pólizas de seguro de hogar pueden utilizarse para cubrir tu vivienda, ya sea en propiedad o alquilada, así como una vivienda que tengas alquilada.
Póliza de seguro de coche
De todas las pólizas de seguro, las del coche son las más comunes. Este tipo de seguro te protege a ti y a tu vehículo de los posibles riesgos y daños en un accidente de tráfico. Los seguros de coche cubren los daños, tanto físicos como materiales, que sufras tú, pero también cubre aquellos que provoques tú en accidentes que sean responsabilidad tuya.
Póliza de seguro médico
Los seguros médicos son aquellos que cubren tus gastos sanitarios. Estos seguros, en función de las coberturas que hayas contratado, te ofrece acceso a la sanidad privada, así como atención de preferencia en los hospitales contratados.
Póliza de seguro de vida
Este tipo de póliza ofrece una indemnización económica a los beneficiarios del asegurado, en caso de que este sufra una muerte por cualquiera de las razones que se hayan negociado y que formen parte del contrato. En este sentido, tienes que tener muy en cuenta que hay ciertas causas de muerte que quedan fuera de este tipo de pólizas, debido a problemas pasados.
Póliza del seguro de responsabilidad civil en la empresa
Esta es una póliza necesaria para cualquier empresa, ya que cubre los daños a terceros que puedan ocasionarse dentro de la empresa. Es decir, que te protege de cualquier daño que pueda sufrir un cliente, un empleado o cualquier persona dentro de tu negocio.
Otros tipos de póliza
En el mercado existen otro tipo de pólizas. En algunos casos muy concretos, puedes encontrar algunas pólizas de seguro creadas específicamente para cubrir tus necesidades.
Por otra parte, existen pólizas de seguros para ciertas actividades de riesgo, como podrían ser militares o agentes del estado, así como pólizas de seguros para motocicletas, furgonetas o incluso un seguro para proteger archivos, discos duros o servidores.
También existen algunas pólizas muy concretas, por ejemplo, algunos porteros de fútbol han asegurado sus manos, mientras que otros jugadores de fútbol hacen lo mismo con las piernas. Grandes chefs de todo el mundo han asegurado sus brazos o su rostro, en caso de sufrir algún accidente de este tipo.